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Lado B

El lado B de la Inteligencia Artificial: Lo que no queremos que pase

9 de mayo de 2023 - 18:53

Por Fernando Cuscuela. Desde hace semanas que miramos a la IA ya no tanto como la que nos salvará del mundo sino con cierto temor pensando hasta dónde llegará.

¿Cómo lograremos usarla de forma positiva sin que sea contraproducente para nuestro trabajo, nuestra vida y nuestros vínculos?

Empiezan a surgir algunas dudas sobre su uso responsable. ¿Por qué? Porque ya empezamos a registrar algunos de los resultados que se dan en forma de cascada tras el avance de la Inteligencia Artificial.

• Pérdidas de puestos de trabajo: si bien está claro que la IA no va a reemplazar al ser humano, sí estamos en condiciones de decir que aquella tarea que antes hacían 3 personas, seguramente a futuro la hagan dos o bien una única persona junto a la Inteligencia Artificial. Como ya les mencioné en otros newsletters, así como va a destruir puestos de trabajos, también creará nuevas fuentes laborales que aún no conocemos.

• Barreras: la inteligencia artificial -por momentos- termina siendo perjudicial para las poblaciones marginadas al aumentar los obstáculos que deben afrontar dado que este tipo de tecnología empieza a ser una barrera cultural para aquellos que no tienen acceso a la tecnología.

• Educación: en el sistema educativo el uso de la Inteligencia es un interrogante constante. La inteligencia artificial (IA) tiene el potencial de revolucionar la forma en que pensamos sobre la educación. Desde algoritmos de aprendizaje personalizados hasta realidad virtual y aumentada, las herramientas y tecnologías. Aunque también lo que preocupa es el impacto de la IA en la privacidad de los estudiantes y la seguridad de los datos.

• Desinformación: un clásico desde los inicios de la comunicación. Pero ¿qué pasa ahora? Las imágenes hiperrealistas del Papa Francisco en un encuentro de motoqueros o de Donald Trump resistiéndose a un arresto son dos de los ejemplos que ya estuvieron circulando en redes y que llamaron mucho la atención. Anteriormente a la IA resultaba más fácil detectar un fake news.. El problema se da que con el uso de la IA ahora es mucho más simple publicar/diseminar información, que en una primera lectura parece real, pero que en verdad resulta falsa.

Entre nosotros y en una nueva fase

La IA hace rato que convive con nosotros. No surgió de un día para el otro. Está entre nosotros hace décadas y no tiene nada que ver con la robótica (como mucho, el símil de cerebro y cuerpo).

Entonces: ¿Por qué ahora todo el mundo está entrando en pánico?

La respuesta es que la IA fue cambiando de una forma tan rápida que no tuvimos tiempo de reaccionar.

Hasta hace poco la IA con la que trabajaban los científicos era de un tipo básico denominada IA Estrecha.

Como lo es SIRI que es capaz de acatar órdenes sencillas, pero no se le puede pedir (pese a las últimas actualizaciones) otras acciones que requieran un mayor razonamiento.

¿Esperanzados? Bastante

Hoy en día, la Inteligencia Artificial está cambiando el mundo y nuestra forma de vida de maneras que antes no hubiéramos imaginado.

Desde la atención médica y la agricultura hasta el transporte y la educación, la IA está transformando cada industria y sector.

También está ayudando a resolver algunos de los desafíos más urgentes que enfrenta nuestro planeta, como la crisis climática, la escasez de recursos y la enfermedad.

Los científicos están utilizando la IA para descubrir nuevos tratamientos para enfermedades, los agricultores la están usando para mejorar la eficiencia de los cultivos y las empresas la emplean para reducir su huella de carbono.

Por lo tanto, podemos tener una mirada más esperanzadora sobre el uso de la IA en el futuro.

Si bien hay desafíos que debemos enfrentar, como la privacidad y la seguridad, tenemos la capacidad de moldear el futuro de la IA para que beneficie a la humanidad en su conjunto.

Con la colaboración y el compromiso de todos, podemos asegurarnos de que se utilice de manera responsable y ética para lograr un futuro mejor y más brillante para todos.


Fernando Cuscuela es CEO en OML | Transformación y Estrategia Digital.

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